Culpabilidad y Orgullo

Las discusiones son algo habitual en la vida. La furia aparece, pero sobretodo, el orgullo.

Aunque sabes que tienes la culpa, que no debes haberte puesto de aquel modo, no pides perdón. La culpa te reconcome y tu interior explota.
Todo podría estar mejor con dos simples palabras "lo siento", pero no las dices. Ya todo te da igual, prefieres estar así antes de herir tu orgullo.

Lo siento, esa soy yo, es lo que hay.